Cuerda diámetro 11 mm para líneas de vida flexibles EN1891ref AC200

Cuerda de 11 mm de diámetro para usar como línea de vida flexible con dispositivos anticaídas (AC012, …). Disponible en varias longitudes (10 m, 20 m, 30 m,…). EN1891

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Los trabajos en altura llevan asociados una gran cantidad de riesgos, siendo el principal la posibilidad de que se produzca una caída a diferente altura, un tipo de accidente que podría tener consecuencias fatales para el trabajador o graves lesiones. Por esta razón cada profesional que desempeñe trabajos con este tipo de riesgo debe contar con los Equipos de Protección Individual apropiados para su tipo de actividad, con sistemas anticaídas que estén formados por diferentes componentes como las líneas de anclaje flexibles, también denominadas líneas de vida. Estos sistemas anticaídas están formados por un elemento longitudinal que puede ser de cable de acero, cinta o una cuerda como la Cuerda diámetro 11 mm para líneas de vida flexibles EN 353-2 ref AC200.

La  Cuerda diámetro 11 mm para líneas de vida flexibles EN 353-2 ref AC200 es un elemento que se puede utilizar como línea de vida con dispositivos anticaídas y que se encuentra disponible en varias longitudes (10 m., 20 m., 30 m., 40m y 50 m.).

Para que un sistema anticaídas sea considerado como una línea de anclaje flexible éste debe encontrarse sujetado, al menos, en dos puntos, para que así consiga mantenerse de manera horizontal, con la posibilidad de contar con diferentes elementos intermedios que sean necesarios para mantener el sistema con mayor seguridad, además de contar con un cable, cinta o cuerda que sirva como un elemento de guiado para que pueda desplazarse por la misma el trabajador, siempre con la mayor seguridad y protección posible.

Los dispositivos anticaídas deben estar siempre en el estado perfecto para garantizar que cumplen con su cometido y que su utilización no implica riesgo alguno para el profesional, que en el caso de que detecte algún tipo de deterioro o deficiencia en los mismos debe informar a la persona responsable para que esta lo sustituya por un componente nuevo, minimizando así los riesgos para el trabajador.

La protección del usuario en zonas de riesgo de caída en altura es fundamental, contribuyendo un alto nivel de seguridad a que los trabajadores desempeñen sus labores de una forma más eficiente y segura, pudiendo estar tranquilos de estar utilizando sistemas que impidan sus caídas y, por tanto, evitando o reduciendo las consecuencias de lesiones derivadas de las caídas a diferente altura, uno de los mayores peligros en el entorno laboral.